EL CONCEPTO DE PSICOAROMATERIA SIGUE SIN QUEDAR CLARO
Después de la autoedición de mi primer libro, cuando éste estuvo en mis manos el siguiente paso fue proceder a la venta del mismo al particular, familia, clientes de la consulta… era hacer las presentaciones en centros y escuelas de terapias integratives, así que me dije… vamos allá, como lo quieres presentar Africa y la primera idea fue fulminante, no podía separarlo de otra de mis grandes pasiones la aromaterapia.
Así que seguidamente ideé un juego dinámico entre aromas y letras a las que llame tardes de Aroma-Lectura. Todo un éxito, os lo aseguro.
Los que me conocéis sabéis que parto mucho de la observación en cualquiera de mis actos o los de mi alrededor y de que me he dado cuenta esta vez… de que el concepto de psico aromaterapia a pesar de buenas escuelas de formación y buenos profesionales, el concepto en sí sigue sin quedar claro. Sobre todo, para aquellas persones que buscan “magia” en las terapias sin efectuar acción ni cambio alguno en sus vidas.
Sigue siendo un misterio de difícil comprensión para muchos, sino cambiamos nuestro estigma mental de “remedio o pastillita natural” es igual “remedio o pastillita farmacéutica”. Elijas lo que elijas la acción, tu acción para el cambio va a ser necesaria.
Además, tenemos un agravante que no juega precisamente a nuestro favor, “acceso a demasiada información de difícil criba en cuanto a su autenticidad y además con una accesibilidad inmediata”
Un aceite esencial por sus moléculas se les atribuyen unas propiedades en concreto y a veces incluso se le encasilla para un remedio exclusivo para uso sobre todo en interfaz de piel.
Pero cuando hablamos de usar un aceite esencial en psicoaromateria es tema cambia y mucho.
La metodología para la que me forme, mi trabajo consiste en encontrar un aroma que aporte a través del olfato las sensaciones que harán que cubran y acompañen a la persona en el proceso en el que se encuentra justo en esos momentos hasta que integre el aprendizaje de vida por el que está pasando.
La naturaleza nos lo pone siempre fácil y nos lleva al final del mismo camino y recorrido, aunque sea a veces dando un rodeo para protegernos, pero nos lleva.