El masaje deportivo que hoy conocéis ha tenido un desarrollo y evolución en paralelo a la del deporte.
Se combinan según se requiera, masajes sobre músculo en estiramiento, kinesiotape, tapping o vendaje funcional, cyriax, ventosas, moxibustión…
Esto ha permitido que sea utilizado como ayuda y mejora en la categoría de equipos pequeños que desconocen la existencia de esta figura específica dentro del escala del deporte, ya que a diferencia, los grandes clubes tienen ya su médico deportivo, entrenador, preparador físico y fisioterapeuta.
Dentro de la práctica del deporte y la disciplina deportiva que conlleva cada una (paradas bruscas, giros en seco, patadas, choques etc.…) en la que es necesario que se involucren diferentes grupos musculares, nos encontramos que hay algunos que se fatigan más, lesiones más comunes y reiterativas, habituales, otras que se cronifican etc.… por lo que es muy importante tener el debido conocimiento.
El masaje deportivo podríamos clasificarlo en sesiones de preparación y entrenamiento, pre y post competición.
Se realizan trabajos que ayudan a la fuerza, velocidad y resistencia del deportista. También ayuda a la prevención de lesiones, estimulación del músculo sano y tonificación del músculo después de haber sufrido una lesión.
A veces y según las circunstancias que se den, nuestro trabajo en cabina empieza cuando finaliza la del fisioterapeuta o bien se realiza conjuntamente. Se centra principalmente en la prevención y puesta a punto del deportista.
Algunos ejemplos son:
Nuestro objetivo es que el “atleta” pueda cumplir sus objetivos y para ello utilizamos diferentes técnicas y metodologías con masaje más fuertes y profundos que pueden ser desde un masaje de pre y post competición, preparación temporada de stage, movilizaciones, masaje en estiramientos, tapping, vendaje funcional ó kinesiotape. Por lo general trabajamos fuerza, velocidad y resistencia.
Los principales beneficios del masaje deportivo son:
Masaje Relajante Neurosedante
